United Artists (I): la fundación

     El 5 de febrero de 1919 fue creada la compañía cinematográfica United Artists por cuatro conocidos actores y productores que coincidieron en el recién nacido Hollywood: Mary Pickford, Charles Chaplin, Douglas Fairbanks y D.W. Griffith.

Primer logotipo de UA y sus oficinas en Boston (Wikimedia Commons)

    En 1910, Pickford y Griffith llegaron desde Europa a Los Ángeles para continuar con el rodaje de la película Oh Uncle!, de la Biograph Company. Por aquel entonces la industria del cine era inexistente en Hollywood, y antes tampoco se daba importancia a los actores de cine, que solían pertenecer a la clase baja. Sin embargo, esto se logró cambiar gracias a D.W. Griffith. De padre sudista, su familia sufrió penurias económicas tras la guerra de Secesión, por lo que entró a trabajar en un teatro ambulante. En 1907 se topó con una cámara de cine, comenzando a filmar en la Biograph Company. Destacó por su narrativa fluida y los empleos del primer plano para simpatizar con los personajes. En 1913, Griffith abandonó Biograph por divergencias sobre el cine concebido como arte, y en 1915 estrenó El Nacimiento de una Nación, llevándolo a la inmortalidad del cine. Por su parte, Mary Pickford, perteneciente al elenco de obras de la Biograph, fue una de las primeras superestrellas internacionales. Con cinco años, empezó en los escenarios para ayudar económicamente a su familia. En 1907 trabajó en Broadway pero sin mucho éxito económico. Entonces conoció a Griffith ya que fue a hacer una prueba de actores para él, y fue aceptada para diferentes papeles secundarios. Sin embargo, al cabo de unos años se convirtió en una gran estrella muy bien pagada (más de un millón de dólares al año).

D.W. Griffith y Mary Pickford (Wikimedia Commons y Pxhere)

    En 1915 destacaba otro actor, llamado Charles Chaplin. Muy precoz también en el teatro, con diecisiete años fue contratado en una compañía ambulante interpretando un tipo de comedia inglesa caracterizada por lo absurdo y las pantomimas. Se inventó un vestuario y un maquillaje distintivos para las películas en las que trabajaba a las órdenes de otro genio de la comedia, Mack Sennett. Un tiempo más tarde, Chaplin dejó los estudios de Sennett y comenzó a rodar películas más sofisticadas y elaboradas. Se convirtió en uno de los actores más famosos del momento y se rodeó de amistades muy conocidas. En una fiesta de Hollywood conoció a Douglas Fairbanks, un actor también muy reconocido y alabado por el público, sobre todo por sus acrobacias en las películas. Fairbanks debutó en Broadway con 19 años, habiendo trabajado antes en otros oficios y estudiado en la universidad. Años más tarde trabajó en una ocasión con Griffith, y posteriormente montó su propia compañía de cine, primero siendo productor, y luego guionista. Sin embargo, no tuvo control sobre la distribución de sus películas (lo hacía Paramount).

Douglas Fairbanks y Charles Chaplin (https://imgur.com/gallery/fbJ9E)

    Las distribuidoras querían estandarizar los productos que manejaban, que todas las películas fueran vendidas por un precio fijo por metro de film, ignorando el coste de producción de cada una, o el peso de los actores que aparecían en ellas, así como la imposición de comprar packs de películas. Ni Pickford, ni Chaplin, ni Fairbanks, ni Griffith (cada uno de forma independiente) estaban de acuerdo con las reglas de las distribuidoras.

    En la mitad de la década de 1910, Hollywood ya se había convertido en la referencia de los estudios de cine, pero aún era un lugar modesto en el que todos los actores se conocían. Allí fue donde coincidieron Pickford y Griffith con Chaplin y Fairbanks. Poco después, Pickford y Fairbanks comenzaron un noviazgo que culminó en matrimonio años más tarde. En 1917 ambos, junto con Chaplin, comenzaron unas giras nacionales para promover la venta de bonos de guerra (I Guerra Mundial) en Estados Unidos, consiguiendo un gran éxito. Un año antes, Griffith estrenó otra de sus películas más significativas: Intolerancia 

Fairbanks, Pickford y Chaplin en Washington promoviendo los bonos de guerra. A la izquierda, Franklin Delano Roosvelt, entonces secretario de la Marina. (https://marypickford.org)

Cartel de Intolerancia (1916) (Filmaffinity)

    En 1918, aunque cada uno tenía su propia productora y habían conseguido algún control sobre la distribución de sus películas, tenían la clara opinión de que aún estaba restringida la libertad creativa. A finales de año, algunos hombres de negocios de Hollywood vieron que las estrellas estaban empezando a ser demasiado poderosas, y entonces comenzaron los rumores de fusión entre algunas productoras, que llevaría al monopolio de distribución de películas, y que conllevaría la reducción de salario de los actores y del coste de producción. Fue entonces cuando Chaplin, Fairbanks y Pickford junto con William S. Hart (otra estrella del wéstern del momento) y Griffith,  se presentaron en el hotel donde se estaba llevando a cabo la reunión para el monopolio de distribución. Anunciaron que iban a crear una nueva empresa juntos, llamada United Artists, con el objetivo de proteger la independencia de los actores, de la libertad artística, y luchar contra la fusión, y la prensa se hizo eco de esta noticia. Finalmente, William S. Hart se retiró de la participación formal. Días más tarde, los cuatro actores firmaron el acuerdo de creación de United Artists, que respetaría la libertad creativa y financiera que buscaba cada uno. Se negaron a que el valor artístico y económico de sus producciones estuvieran estandarizados y determinados por las distribuidoras, consiguiendo que el entretenimiento de las películas fuera elaborado, sofisticado y original.

    United Artists, que ha tenido una larga trayectoria, obtuvo su esplendor en la década de los 20, con películas como Las Dos Tormentas (1920), Robin de los Bosques (1922), La Pequeña Anita (1925) o La Quimera del Oro (1925). También en United Artists se produjeron películas de Gloria Swanson o Rodolfo Valentino. La creación de esta productora supuso que el poder de distribución ya no lo tuvieran los hombres de negocios que poseían las patentes de los aparatos, sino que se abrió un modelo de producción y de distribución de calidad cinematográfica, creado por y para los artistas y la audiencia. 

Tras la firma de la creación de United Artists (Wikimedia Commons)